Volvo Trucks nos presenta siete datos sorprendentes, probablemente desconocidos sobre las baterías de estos vehículos.
Las baterías son uno de los principales desafíos para la adopción masiva de camiones eléctricos como medio de transporte de mercaderías, en particular en lo que hace a su capacidad y duración, eficiencia, autonomía e impacto en el medio ambiente.
Por eso, en el mundo de los camiones eléctricos, la información sobre las baterías es clave para comprender su impacto y futuro en el transporte de mercancías.
Aquí se presentan siete datos sorprendentes, probablemente desconocidos sobre las baterías de estos vehículos.
1. El impacto climático de las baterías disminuye rápidamente durante el uso
Aunque la fabricación de baterías de iones de litio implica un alto consumo de energía y emisiones de CO2, este impacto se compensa rápidamente durante el uso del vehículo. Según un estudio de la International Council on Clean Transportation (ICCT), los camiones eléctricos pueden reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 63% en comparación con sus equivalentes diésel.
Tomas Córdoba, ingeniero de Producto de Volvo Trucks Argentina, explica que “esto se debe a que, una vez en funcionamiento, los camiones eléctricos no emiten CO2, lo que contribuye significativamente a la reducción de la huella de carbono”. Después de recorrer solo 100,000 km, una distancia que a menudo se alcanza en un año, el impacto ambiental de un camión eléctrico es inferior al de su equivalente diésel. “Esto resalta la importancia de considerar todo el ciclo de vida del vehículo”, subraya Córdoba.
El tema de la autonomía, también es relevante: recientemente, en una cooperación de las firmas suizas de DPD, Futuricum y la alemana Continental, se estableció un récord con la distancia más larga recorrida por un camión 100% electrificado: un total de 1099 kilómetros. Se hizo con un Volvo FH, de 19 toneladas, que cuenta con 680 CV de potencia y una monumental batería de 680 kWh; la más grande instalada.
Por su parte, nuevos datos de seguimiento de la flota de camiones eléctricos de Volvo revelan que recorrieron más de 80 millones de kilómetros (ver nota) en tráfico comercial en todo el mundo desde 2019. Cubrir la misma distancia con camiones diésel equivalentes habría consumido más de 25 millones de litros de diésel. En ese mismo período, las emisiones de dióxido de carbono se habrían reducido en 68.000 toneladas en comparación con unidades diésel.
2. La accesibilidad a la electricidad ecológica está en aumento a nivel global
El acceso a electricidad ecológica es fundamental para maximizar los beneficios climáticos de los camiones eléctricos. Afortunadamente, la disponibilidad de energías renovables está aumentando en todo el mundo. Por ejemplo, en 2020, la cuota de energías renovables en la UE alcanzó el 37% desde el 34% en 2019, y la cuota mundial de energías renovables fue del 29 %, en comparación con el 27 % en 2019. En 2021, el incremento de la electricidad renovable se aceleró más rápido que nunca en todo el mundo. Según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), las energías renovables representarán casi el 95 % del aumento de la capacidad energética mundial hasta 2026.
Pero hay varios otros factores medioambientales importantes que deben tenerse en cuenta con los vehículos eléctricos. Por ejemplo, la ausencia de emisiones de gases de escape, la reducción del ruido, el mejor entorno de trabajo, la importante mejora de la calidad del aire local y la posibilidad de transportar mercancías en zonas de cero emisiones.
3. Las baterías de camiones eléctricos son reciclables y reutilizables
Las baterías de los camiones eléctricos no solo son reciclables, sino que también pueden ser reutilizadas antes de llegar al final de su vida útil. Una vez que la capacidad de una batería disminuye, puede ser utilizada en rutas que requieren menor autonomía o en vehículos con operaciones más ligeras. Posteriormente, la batería puede ser reacondicionada o reutilizada en el almacenamiento de energía residencial o industrial. Finalmente, los materiales valiosos de la batería son recuperados a través del reciclaje, lo que cierra el ciclo de vida del producto.
Volvo ha implementado programas para dar una segunda vida a las baterías de sus camiones eléctricos. En colaboración con Connected Energy, la fábrica de camiones sueca reutiliza estas baterías en sistemas de almacenamiento de energía, lo que no solo prolonga su vida útil, sino que también reduce la necesidad de extraer nuevos materiales. “Este enfoque circular es esencial para minimizar el impacto ambiental y aprovechar al máximo los recursos disponibles”, sostiene Tomas Córdoba.
4. Los camiones eléctricos con batería y los de celda de combustible se complementan
Los camiones eléctricos con batería y los accionados por celdas de combustible de hidrógeno no compiten entre sí; en realidad, se complementan. Mientras que los camiones eléctricos con batería son ideales para la mayoría de las operaciones de transporte actuales, los de celda de combustible ofrecen una alternativa de cero emisiones para tareas de alta demanda energética, como el transporte de larga distancia. A medida que ambas tecnologías evolucionen, los camiones eléctricos con batería seguirán siendo una opción competitiva y rentable para el transporte de mercancías.
5. La industria trabaja activamente para garantizar la trazabilidad en la cadena de suministro de baterías
El cobalto, un componente esencial de las baterías de iones de litio, es objeto de preocupación debido a las condiciones laborales en su extracción. Sin embargo, el sector automotriz ha implementado medidas para asegurar la trazabilidad de los materiales, garantizando que los proveedores respeten los derechos humanos y laborales. Este esfuerzo colaborativo busca eliminar las violaciones de derechos humanos en la cadena de suministro, contribuyendo a la sostenibilidad y la ética en la producción de baterías. “Volvo trabaja activamente para garantizar que los materiales utilizados en sus baterías, como el cobalto, se obtengan de manera responsable.
Esto incluye la implementación de medidas de debida diligencia para evitar violaciones de derechos humanos en las minas de cobalto. La transparencia y la responsabilidad en la cadena de suministro son fundamentales para asegurar que la transición hacia la electrificación no se haga a costa de los derechos humanos”, añade Córdoba.
6. La eficiencia de las baterías en climas fríos es mejor de lo que se cree
Aunque las bajas temperaturas afectan la eficiencia de las baterías, el impacto es menor de lo que se podría pensar. Por ejemplo, en camiones eléctricos como los de Volvo Trucks, la pérdida de autonomía a -10 grados centígrados es solo del 3%, y a -20 grados centígrados, desciende alrededor del 10%. Esto demuestra que los camiones eléctricos pueden operar eficientemente en climas fríos, especialmente si se implementan tecnologías para mantener las baterías a la temperatura óptima. Según Córdoba, esto se debe “a los avances en la tecnología de gestión térmica, que aseguran que las baterías mantengan su eficiencia y autonomía incluso en climas adversos. Este desarrollo es determinante para la adopción de camiones eléctricos en regiones con inviernos severos”.
7. Los fabricantes están buscando soluciones para el acceso a minerales esenciales
Según el informe Global EV Outlook 2022 de la Agencia Internacional de la Energía (IEA), los precios del litio, cobalto y níquel, minerales esenciales para la fabricación de baterías, aumentaron considerablemente, lo que podría incrementar el costo de los paquetes de baterías en un 15% si estos precios se mantienen.
A largo plazo, el acceso a minerales para la producción de baterías es un desafío que la industria está abordando activamente. Los fabricantes están invirtiendo en la investigación de minerales alternativos, reduciendo la cantidad de materiales necesarios y aumentando el uso de materiales reciclados. Estas medidas no solo aseguran la viabilidad de la electrificación del transporte, sino que también contribuyen a cumplir con los ambiciosos objetivos de emisiones de gases de efecto invernadero establecidos en el Acuerdo de París.
El mercado de camiones eléctricos y el lugar de Volvo
El mercado global de camiones eléctricos está experimentando un crecimiento significativo. Se estima que su tamaño alcance los 41,67 mil millones de dólares en 2024 y que crezca a una tasa compuesta anual del 25,21%, llegando a 128,26 mil millones de dólares en 2029, según Mordor Inteligence
Volvo Trucks se posicionó como un líder en el mercado de camiones eléctricos a nivel global. Desde el lanzamiento de sus primeros modelos en 2019, entregó más de 3.500 camiones eléctricos a clientes en 45 países.
En Europa, Volvo tiene una cuota de mercado del 56% en el segmento de camiones eléctricos, mientras que en Estados Unidos representa el 44% de las ventas. En América Latina, Volvo comenzó a entregar sus primeros camiones eléctricos en Brasil, Chile y Uruguay, expandiendo su presencia en la región.
La llegada de estos vehículos a la Argentina dependerá de la matriz energética que defina nuestro país. Una vez que eso suceda, el mercado podrá beneficiarse con la adopción y el uso de esta tecnología.
FUENTE: INSIDEEVS.COM.AR – POR CARLOS ALFREDO PEREYRA