El futuro de Europa. Los transportistas se suman a los agricultores en las protestas contra recortes e impuestos del Gobierno de coalición de socialdemócratas, verdes y liberales de Alemania.
Tras la protesta de los agricultores contra los recortes a los subsidios agrícolas, que hace unos días colapsó Berlín y otras ciudades de Alemania con miles de tractores en caravana, llega ahora el lamento de los transportistas. Más de 1.500 camiones, vehículos pesados y tractores confluyeron este viernes en Berlín para reclamar al Gobierno de socialdemócratas, verdes y liberales del canciller Olaf Scholz que renuncie al incremento de los peajes y al aumento del precio del CO2 de los combustibles. Desde el 1 de enero de este año, el precio de la gasolina, el gasóleo y el gas es de 45 euros por tonelada.
Aparte de estas reclamaciones, los camioneros demandan también mejores infraestructuras para la profesión, según la convocatoria oficial de la marcha, lanzada por la Asociación Federal de Logística y Transporte Profesional (BLV-pro). “Para nosotros se trata simplemente de tener la oportunidad de sobrevivir en el mercado en el futuro”, dijo su portavoz, Daniel Beständig. El grueso de la concentración de camiones se produjo en los alrededores de la emblemática puerta de Brandemburgo berlinesa.
Según la policía de Berlín, a las doce del mediodía del viernes había en la zona 1.500 manifestantes con 620 camiones y 150 tractores, pero el número debe crecer durante la jornada reivindicativa, que continúa hasta las 18 horas. La presencia también de tractores se explica porque los camioneros –que apoyan la protesta del sector agrario- cuentan a su vez con el respaldo de los agricultores, cuyos productos transportan por todo el país y hacia el extranjero.
Estas movilizaciones ilustran un agudo clima de malestar con la coalición gobernante, que naufraga en los sondeos –los tres partidos suman en torno al 33% de apoyos, lejos de la mayoría del 52% que obtuvieron en las elecciones del 2021– en un año con citas electorales clave: comicios europeos el 9 de junio y urnas regionales en septiembre en tres länder del este.
La asociación de transportistas BLV-pro eligió explícitamente para la protesta esta semana, por ser la primera de sesiones en el Bundestag (cámara baja del Parlamento), y porque coincide con la apertura de la Grüne Woche, la semana agrícola en el recinto ferial de Berlín, que recibe cada año a miles de visitantes.
FUENTE: LA VANGUARDIA – POR MARÍA PAZ LÓPEZ (CORRESPONSAL BERLÍN)